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Mark Zuckerberg, acaba de donar 45.000 millones de dólares. No obstante, esta iniciativa filantrópica no le impedirá seguir invirtiendo en empresas e influir en la esfera política.
Zuckerberg y su mujer, Priscilla Chan, crearán una sociedad anónima destinada a "curar enfermedades, diseñar planes de aprendizaje personalizados y conectar a personas", sorteando ciertos límites fiscales.
Este paso pone de manifiesto un nuevo modelo basado en la filantropía que va más allá de las fundaciones. La fusión de las estructuras, los objetivos corporativos y los filantrópicos "reflejan parte de los valores de Silicon Valley," asegura Amir Pasic, decano de la Lilly Family School of Philanthropy de la Universidad de Indiana.
Según Pasic, uno de los modelos que mezclan ambas estructuras es la empresa de inversión filantrópica Omidyar Network, creada por el fundador de eBay Pierre Omidyar. Esta compañía combina las estructuras de la SRL y de la fundación. Will Fitzpatick, el ex abogado de la empresa, comenta que "el proyecto de Omidyar comenzó como una fundación, pero se vio obligado a cambiar de enfoque por los límites que implicaba tal modelo". (+Expasion.com)
