El archipiélago artificial de la costa de Dubái 'The World' nunca alcanzó las pretensiones marcadas. Este grupo de 300 islas que intentaba formar un mapamundi nació en 2003 con la intención de convertirse en un refugio de la jet set mundial, sin embargo la crisis económica o su propia falta de viabilidad ha provocado que solo nueve de ellas tengan una actividad notable.
En el año 2008 se colocó el último grano de un monumental proyecto que cautivó al mundo y requirió una inversión de 14 mil millones de dólares. Ubicado junto al también archipiélago artificial Plam Islands, el 60% de las islas ya estaban vendidas incluso antes de que fueran inauguradas. Richard Branson, por ejemplo, compró las islas que representan a Gran Bretaña. Por desgracia, la crisis económica azotó la ingente inversión y hoy The World es la sombra de lo que fue. De hecho, ya en 2009 las deudas de la promotora Nakheel Properties alcanzaban los 25 mil millones.

Además de la falta de desarrollo de la gran mayoría de los islotes, se calcula que cada año la superficie de estas formaciones artificiales se está reduciendo entre 10 y 40 centímetros, y el perímetro que asemejaba la geografía de cada país está totalmente desdibujado. América Central es casi inexistente, Australia son hileras de arena, y Europa, África y Asia se han fusionado en una masa difusa. Asimismo, las islas carecen de suministro eléctrico conectado a tierra.
A pesar de esta situación, en la última época han sido varios los empresarios que se han animado a hacer negocios en The World. (El economista.es)