El espectacular yate de aspecto clásico se pone en movimiento gracias a la energía cinética que generan sus velas, siendo el coste anual de aproximadamente unos 25 millones de euros.

La goleta del fundador de Amazon está considerada la más grande del mundo y ha costado unos 500 millones de dólares fondea en la bahía de Palma de Mallorca.

Koru, la lujosa goleta de tres palos que está considerada la mayor del mundo y que es propiedad del fundador de Amazon, Jeff Bezos, se encuentra en aguas de la bahía de Palma, en su travesía inaugural. Se trata de un espectacular yate de vela de 127 metros de eslora construido en Países Bajos por encargo de Bezos, quien renunció como CEO de Amazon, aunque sigue siendo su presidente ejecutivo y es el tercer hpmbre mas rico del mundo, con un patrimonio neto de alrededor de 125.100 millones de dólares, según Forbes.

Este yate de aspecto clásico, que ha costado unos 500 millones de dólares (unos 450 millones de euros), está propulsado por la energía cinética generada por las velas, pero como la mayoría de los yates de vela, también tendrá potencia de motor. El casco de acero del Koru es de color azul marino, cuenta con dos cubiertas y desplaza 3.300 toneladas. El coste anual de mantenimiento ronda los 25 millones de dólares (22.600.000 euros). También dispone de una piscina de inmersión visible en la popa.

Actualmente, la goleta Koru que lleva unos 40 tripulantes, navega bajo la bandera de las Islas Caimán, el segundo estado de bandera más popular para superyate   con unos 1.300 yates registrados.

Durante la fase final de su construcción, de la cual se encargó la empresa Oceanco, el yate estuvo rodeado de polémica. La compañía neerlandesa solicitó al municipio de Rotérdam poder desmontar el icónico puente De Hef para que pudiera pasar la embarcación, cuyos tres mástiles no podían pasar por debajo debido a la altura, en su camino al Mar del Norte. El propio Bezos se ofreció a correr con los gastos que supondrían los trabajos, pero las críticas surgidas y la amenazas de posibles actos de vandalismo hicieron que, finalmente, Oceanco decidiera trasladar la goleta sin mástiles y montar estos en otro astillero del complejo portuario. (Agencias / cincodias/EFE)