Qatar habría comprado los votos para ser sede del Mundial de 2022, asegura el prestigioso semanario France Football en una larga investigación de 20 páginas que lleva por nombre: “Qatargate”. Según se desprende de su reportaje, Qatar dedicó enormes cantidades de dinero para comprar los votos necesarios en el seno del Comité Ejecutivo de la FIFA para lograr la organización del Mundial, que consiguió el 2 de diciembre de 2010 con 14 votos, frente a los 8 de Estados Unidos.
La FIFA se sumió en una nueva polémica después de que el hombre escogido para investigar las acusaciones de corrupción en torno al proceso de selección de la Copa Mundial de la FIFA de 2022 acusase al órgano de gobierno del fútbol de tergiversar sus hallazgos.
La FIFA anunció que seguía confiando en Qatar para albergar el torneo de 2022 tras concluir que los posibles comportamientos impropios en el proceso de selección para torneo tenían “un alcance muy limitado”.
Hans-Joachim Eckert, el presidente de la cámara adjudicataria del comité de ética de la FIFA, concluyó que no había motivos para reabrir los procesos de licitación del torneo de 2018, entregado a Rusia, y del Mundial de 2022.
Las conclusiones de Eckert derivan de una investigación del ex fiscal estadounidense Michael J. García por las acusaciones de corrupción que rodean la votación del comité ejecutivo de la FIFA de diciembre de 2010 para escoger las sedes de 2018 y 2022.
Pero la publicación de un sumario de 42 páginas llevó a García, que preside la cámara de investigación de la FIFA, a emitir un comunicado desde sus oficinas en Nueva York desestimando el informe de Eckert.
En él dice que el sumario “contiene numerosas interpretaciones sustancialmente incompletas y erróneas de los hechos y conclusiones detalladas por la cámara de investigación”, añadiendo que recurrirá la decisión al comité de apelaciones de la FIFA.
García había pedido que se publicase su informe al completo, que se cree que tiene unas 350 páginas. Eckert dijo que no es necesario. (Finalcial Times / Agencias)